Doce personajes digitales creados en el CIER-Sur

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Integrantes del Equipo de Desarrollo de la Unidad de Contenidos del CIER-SUR ilustraron y animaron a los doce personajes que aparecerán en los courseware: Jaison, Pipe, Chucho, Rebecca, Nacho, Octavio, Gina; Clara, Willinton, Olga; Susy y el robot Buksy son los nombres con los que los bautizaron sus creadores César Matiz, Romy Paulin Cuevas y María Cristina Reyes.

El proceso de creación de un personaje pasa por varias etapas, que se van simplificando en la medida en que se avanza en la construcción de la ilustración. Al respecto Romy Cuevas explica: “Al personaje no hay que llenarlo con mucho detalle porque frena un poco el proceso. Hay que mirar la construcción a partir de figuras geométricas, algo que se tiene en cuenta es la proporción, por ejemplo, como los personajes deben ser jóvenes, la proporción es diferente a la de un adulto o un bebé. Asimismo los detalles de las expresiones, de los ojos y la nariz, que sean sencillos para que los procesos de animación sean más rápidos”.

Cada uno de estos personajes debe demostrar su temperamento a través de la creación de rasgos distintivos que se pueden apreciar en la manera en cómo actúan y se comportan. Para el caso de los materiales educativos que se están elaborando, estas características deben ser afines a los niños y niñas colombianos. María Cristina Reyes, ilustradora, cuenta cómo son las personalidades: “Por ejemplo, Jaison es el skate [Un skate es quien practica el skateboarding un deporte que consiste en deslizarse sobre una tabla con ruedas] y se pensó como alguien divertido, que le gusta estar siempre montando patineta; Willy, es el típico caleño salsero, confianzudo y coqueto con las mujeres. Chucho, es caucano, es un niño al que le gusta molestar en la clase, aunque también es tímido. Hay otro personaje que es el niño bonito, se llama Nacho, él va al gimnasio, al estadio, vive pendiente del fútbol y le gustan los deportes; y pues no podía faltar la niña pila, ella es Olga, le gusta leer, va a los museos y está pendiente de todas las actividades culturales del colegio y de la ciudad”.

En la elaboración de los dibujos el proceso creativo es fundamental, y como explica César Matiz, es bastante arduo, ya que fue importante unificar las ideas de los tres ilustradores y tener presente los rasgos culturales, como por ejemplo, las diferentes etnias que existen en el país, las edades y el género.

María Cristina Reyes dice que este tipo de trabajo “Hace que los estudiantes se vean identificados y ayuda a que la educación no sea tan cuadriculada. Digamos que esto es para que de alguna u otra forma los chicos sientan empatía con los materiales de estudio”. Además hace hincapié en la necesidad de contar con materiales hechos en Colombia: “Es contextualizar más el proyecto, porque los materiales educativos siempre estaban basados en libros extranjeros; en cambio con los materiales que estamos diseñando la idea, es que se sienta que son hechos en Colombia”.

La producción de los impresos, guías de estudio y talleres, también estuvo a cargo de los ilustradores. En esta etapa, el equipo tardó alrededor de un mes en el proceso creativo, ya que debían lograr una distribución adecuada de los espacios destinados a la escritura y las operaciones matemáticas. El reto, como explican los integrantes del equipo, era “Producir un material limpio, bien organizado y sobre todo sencillo para que los estudiantes no se distraigan”. Estos materiales serán utilizados por los docentes en los cursos de ciencias naturales, matemáticas, lenguaje y otras áreas.

Otro aspecto importante de la producción de los materiales de estudio es la animación de los doce personajes antes mencionados. En esta labor participaron Ángela Jaramillo y Hernán Moreno, animadores 2D del Equipo de Desarrollo de la Unidad de Contenidos.

Estas animaciones son presentaciones cortas que tienen como objetivo apoyar el aprendizaje a partir de situaciones cotidianas ya conocidas por los estudiantes. Hernán Moreno explica: “La idea de hacer estos personajes era acercarse a los estudiantes y representarlos un poco, que se familiaricen y se vean más identificados, para que el mensaje llegue mejor”.

Actualmente existe una animación de minuto y medio que presenta a los doce dibujos con sus rasgos emocionales. Ángela Jaramillo explica la funcionalidad de esta primer muestra: “Eso sirve mucho para los actores que van a hacer las voces porque así pueden ver quién tiene la posibilidad de adaptar su voz a los tonos que manejarían los personajes y ambas partes resulten coherentes”. Así mismo, esta caracterización le sirve también a los pedagógicos y diseñadores instruccionales para la propuesta de manuscritos y guiones haciendo uso adecuado de estos personajes en cada Objeto de Aprendizaje.

Para realizar una animación, primero se debe definir un tema y tener en cuenta un guión:“Los creadores, que son los pedagogos, definen el contenido de la historia que vamos a contar. Luego están los diseñadores instruccionales que interpretan esas palabras en un storyboard que sería el guión gráfico. Este guión tiene los dibujos que nosotros necesitamos como guía y a partir de ahí empezamos a graficar todo de acuerdo con lo que ya sabemos de los personajes y la historia que se creó”, comenta Ángela Jaramillo y añade que la creación de este tipo de materiales de clase hace que el estudiante se sienta a gusto con lo que aprende y se divierta en el proceso. Por su parte, Hernán Moreno, dice que esta nueva estrategia de enseñanza es de gran valor para los estudiantes y para sí mismo, pues es “Una forma de contribuir a una causa educativa haciendo lo que más me gusta”.

El video de los personajes lo puede ver aquí