Las IEs José María Carbonell y Maricé Sinisterra, dos centros educativos que se enfrentan a nuevos retos educativos

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En el marco del programa Educación Digital para Todos- TIT@, de la Secretaría de Educación Municipal de Cali, el Centro de Innovación Educativa Regional de la zona sur de la Universidad del Valle, viene adelantando desde septiembre de 2015, un acompañamiento in situ a 300 docentes de las instituciones educativas seleccionadas por esa Secretaría. Los días 3 y 4 de marzo estuvimos con los maestros formadores Mabel Suárez y Gilbert Andrés Cruz en su trabajo de acompañar a los docentes Carlos Yusti de la IE José María Carbonell y Diego Díaz de la IE Maricé Sinisterra. Cabe anotar que otros docentes de estas dos instituciones también hacen parte de este proceso de acompañamiento.

La IE José María Carbonell, está ubicada en la comuna 10, en un contexto social relativamente tranquilo de la calle 13 con carrera 32. La modalidad académica de la Institución es técnico-industrial, con énfasis en sistemas, electricidad, electrónica y diseño gráfico. La IE Maricé Sinisterra está ubicada en el barrio El Rodeo al nororiente de la capital del Valle, en la Comuna 12 en un contexto social relativamente complejo de violencia e inseguridad. En este marco situacional y contextual es que se adelanta el trabajo de acompañamiento a los docentes egresados del programa TIT@, con dinámicas sociales particulares, que de alguna u otra forma ha delimitado el trabajo que se viene realizando.

Un poco de historia

Ambas instituciones llevan los nombres de próceres colombianos, quienes dieron su vida por nobles ideales. El primero, José María Carbonell, participó activamente en los sucesos del 20 de julio de 1810, fue él quien movió las masas santafereñas en las horas de la tarde y de la noche. Según los cronistas de esta fecha, Carbonell realizó una inmensa actividad con los sectores populares: corría de taller en taller, de casa en casa, sacaba gentes y aumentaba la masa. Seis años después, el 19 de junio de 1816 Carbonell fue ahorcado en la Huerta de Jaime, en Bogotá (wikipedia,org). La segunda institución debe su nombre a la líder comunitaria y educadora Maricé Sinisterra, quien, según fuentes del mismo colegio, fue una de las fundadoras del barrio El Rodeo donde queda ubicada la Institución Educativa. Ella fue asesinada por el trabajo comunitario que realizaba en el barrio.

El trabajo de los docentes en la incorporación de las TIC en el aula

El acompañamiento que actualmente se realiza tiene en cuenta el trabajo de planificación didáctica y metodológica en las áreas de desempeño que se ha adelantado con los docentes durante el acompañamiento grupal desarrollado recientemente en la Universidad del Valle, el cual se constituyó en la base para la implementación en el aula; esta actividad de acompañamiento no está orientada a evaluar el desempeño del docente ni el institucional, sino a entablar un diálogo constructivo entre pares con base en las prácticas observadas con el fin de incidir en la reflexión, el mejoramiento de las mismas y a replantearse la integración metodológica de las TIC en el aula de clase.

Diego Díaz, docente del área de matemáticas de los grados sexto, séptimo y once, considera que el impacto de las tecnologías en el aula ha sido muy positivo en los muchachos, pues ha marcado una línea divisoria entre el antes y el después, los estudiantes están más dispuestos a recibir las clases y él espera que esto no sea algo momentáneo sino que permanezca en el tiempo. Al respecto enfatiza: “Ellos pueden ver que con el uso que se hace de la tecnología en el área de las matemáticas éstas son más dinámicas, en el caso mío de la estadística y la probabilidad podemos tener acceso a las bases de datos de forma real e instantánea, los gráficos que antes se hacían a lápiz y papel, hoy los software los pueden hacer. Ahora, más que observar la construcción, es la interpretación que hay que hacerle a estos registros de representación como las tablas o los gráficos”

Sobre el uso y apropiación de las TIC en el aula lo considera complicado pues se puede caer en la tendencia de que estos medios tecnológicos se conviertan en algo meramente expositivo: “Es una pequeña inquietud que me agobia, la idea es interactuar, aprovechar todos los recursos y para ello, la estrategia para aprovecharlos al máximo, es hacer un proceso de investigación personal, tratar de mirar los desarrollos en otros países, aprovechar las comunidades de práctica para mirar cómo lo están haciendo otros docentes”, agrega el profesor Díaz, docente de la Maricé Sinisterra desde el 2010.

Carlos Mauricio Yusti, docente de la especialidad técnica en electricidad de los grados noveno, décimo y once, quien conoció el programa TIT@ cuando lo invitaron a la inauguración que se realizó en el INEM, veía el programa como algo lejano, no creía que fuera a llegar al colegio, pero, cuando finalmente su IE fue incluída en el programa, fue gratificante que el colegio tuviera esas tecnologías, pero también para él, le implica asumir muchos retos: “Por ejemplo la clase de hoy, cuyo tema era la simulación de planos, que tenía varios temas, la pude hacer interactiva con el uso del video, con la presentación en el tablero digital, escribía, borraba. Con la profesora de sistemas vamos a hacer una wiki y con la capacitación que recibimos en CIER-Sur, de derechos de autor, de classroom, y los otros programas, uno va a fortalecer otras cosas que de pronto dejaba pasar, saber que esta herramienta no es un videobeam, es una herramienta interactiva genial que uno la puede trabajar con programas que maneja y con los que se pueden instalar”.

Sobre el impacto que las TIC han tenido en sus estudiantes comenta que se dificulta un poquito el control, que usen el computador para mirar otras páginas o se manden mensajes entre ellos, sin embargo comenta que hace poco tuvo una experiencia gratificante: “En una clase con los muchachos de grado décimo donde estamos mirando los conceptos eléctricos, ellos tuvieron que investigar y hacer una presentación en Power Point de las diferencias de la corriente alterna y la corriente continúa, ellos hicieron unas producciones lindísimas y uno de los muchachos que tiene una fama de recochero hizo la mejor presentación. Entonces uno ve que puede cambiar paradigmas con los estudiantes que son indisciplinados, pues a ellos les gustan mucho las tecnologías”.

Los estudiantes opinan sobre el uso de las TIC en el aula

Conversamos con tres estudiantes de las IEs que visitamos. Geraldine Guerrero de 17 años, quien ha aplicado el aprendizaje adquirido en la clase de electricidad en su casa, haciéndole una extensión a su mamá, trabajo que la llenó de gran satisfacción pues se ahorraron el dinero de comprarla en el comercio. Ella opina que el uso de las tecnologías en la clase es otro ambiente: “A veces, como los computadores son tan lentos, no los podemos usar pero igual me gusta. Las clases antes eran monótonas porque era lo mismo; ahora uno ve el profesor con su marcador que pincha el tablero, él se expresa mejor, por ejemplo ahora que nos estaba explicando lo de la escala lo entiendo más así, antes él solo nos hablaba, ahora nos explica desde otro punto de vista, entonces uno ya lo va entendiendo mejor”.

Wilson Narváez, de 16 años, estudiante del grado 11 del José María Carbonell, considera que el uso de las TIC en el aula es muy bueno, pues así se puede interactuar mejor, darle mejor uso a los computadores, al Internet: “El profesor sabe cómo interpretarlo, analizarlo, expresarlo y gráficamente uno aprende más viendo que escuchando. El conocimiento siempre te va a ayudar y más cuando es tu conocimiento propio, me gusta porque yo puedo analizar la casa de mi abuela, si tiene alguna falla, algún corto y ver cómo corregirlo, todo por preocuparme por ella, para que ella pueda estar bien, en la clase hablo con el profesor para ver si las conexiones que ella tiene allá en la casa están bien”.

En la IE Maricé Sinisterra, encontramos un chico muy pilo e interesado en la clase de trigonometría del profesor Diego Díaz, se llama Brayan Stiven Triana de 18 años, quien cursa grado once, proveniente de la capital del país. Él nos comenta que las clases ahora son más interesantes: “Uno le pone más atención porque está relacionado con lo que a uno le gusta, con la tecnología, es más fácil entender y uno participa más, se anima más a venir a las clases, sobre todo porque el profesor Diego le da a las clases como un gustico. A todos nos ha parecido súper genial, esto nos motiva a tener una mejor educación y a ponerle más cuidado a las explicaciones del profesor”.

¿Qué hacer con el celular en la clase?

El teléfono inteligente llegó para convertirse en un instrumento muy necesario para las interacciones sociales. Ahora bien, vetar su uso en salón de clase no parece ser la decisión más sabia. La experiencia del docente Diego Díaz así lo demuestra: “Ahora que el salón tiene wifi, yo he hecho algunos trabajos con los muchachos usando el celular para quitarnos esa venda de que el celular es totalmente prohibido en el salón de clase; he hecho un proyecto de estadística, con una aplicación del celular que ellos utilizan para resolver problemas de matemáticas. Sin embargo el riesgo siempre va a estar ahí, la estrategia es mantenerlos ocupados, cosa que nos les quede mucho tiempo para mirar sus redes sociales y para estar distraídos y cumplir con el propósito que tiene la clase”.

Profesor Carlos Yusti, de la IE José María Carbonell
Maestro formador Gilbert Andrés Cruz, con estudiantes de la IE Maricé Sinisterra
Maestra formadora Mabel Suárez, con docentes de la IE Maricé Sinisterra
Docente Diego Díaz, de la IE Maricé Sinisterra